martes, 28 de marzo de 2017

Mantengamos la llama viva

"Un hombre, que regularmente asistía a las reuniones con sus amigos, sin ningún aviso dejó de participar en sus actividades.
 
Después de algunas semanas, una noche muy fría el líder de aquel grupo decidió visitarlo.
 
Encontró al hombre en casa, solo, sentado frente a una chimenea donde ardía un fuego brillante y acogedor. Adivinando la razón de la visita, el hombre dio la bienvenida al líder. Se hizo un gran silencio.
 
Los dos hombres sólo contemplaban la danza de las llamas en torno de los troncos de leña que crepitaban en la chimenea. 
 
Al cabo de algunos minutos el líder, sin decir palabra, examinó las brasas que se formaban y seleccionó una de ellas, la más incandescente de todas, retirándola a un lado del brasero con unas tenazas. Volvió entonces a sentarse.
 
El anfitrión prestaba atención a todo, fascinado pero inquieto. Al poco rato, la llama de la brasa solitaria disminuyó, hasta que sólo hubo un brillo momentáneo y el fuego se apagó repentinamente.
 
En poco tiempo, lo que era una muestra de luz y de calor, no era más que un negro, frío y muerto pedazo de carbón. 
 
Muy pocas palabras habían sido dichas desde el saludo.
 
El líder, antes de prepararse para salir, con las tenazas regresó el carbón frío e inútil, colocándolo de nuevo en medio del fuego. De inmediato, la brasa se volvió a encender, alimentada por la luz y el calor de los carbones ardientes en torno suyo.
 
Cuando el dirigente alcanzó la puerta para irse, el anfitrión le dijo: Gracias por tu visita y por tu bellísima lección. Regresaré al grupo. 
 
Buenas noches..."
 
 
¿Por qué se extinguen los grupos,las comunidades...?
Muy simple: porque cada miembro que se retira le quita fuego y calor al resto.
 
A los miembros de un grupo vale recordarles que ellos forman parte de la llama.
 
Es bueno recordarles que todos somos responsables por mantener encendida la llama de cada uno y debemos promover la unión entre todos para que el fuego sea realmente fuerte, eficaz y duradero.
 
Mantengamos la llama viva.

viernes, 24 de marzo de 2017

Las mayores riquezas

¿Dónde crees que están las mayores riquezas del mundo?
 
Las mayores riquezas no están en la profundidad de las minas de oro, ni en las minas de diamantes, ni en los profundos pozos de petróleo. Probablemente, el lugar más rico del mundo es el cementerio, ya que allí yacen las más asombrosas ideas que jamás hemos visto. Sueños e ilusiones de valor incalculable, proyectos que yacen enterrados en silencio, cubiertos por una enorme capa de miedos y dudas. Aspiraciones que murieron por la falta de confianza y fe de aquellos mismos que las tenían.
 
Donde tus sueños te lleven, Javier Iriondo

domingo, 19 de marzo de 2017

Encima de un clavo

Recuerdo una vieja historia de un amigo que fue a visitar a un cliente. Nada más entrar por la puerta de la empresa se topó con un perro que estaba tumbado en el suelo. No paraba de hacer extraños gemidos. Parecía que estaba enfermo, como si estuviese protestando por algo, y se revolvía y aullaba. Pero no se movía del sitio.
 
Al encontrarse con el cliente, mi amigo le preguntó qué le pasaba al perro. Éste le respondió que nada, que simplemente se había tumbado encima de un clavo.
 
"Entonces, ¿por qué no se mueve?", se extrañó mi amigo.
 
"Porque parece que todavía no le duele bastante", fue la respuesta.


¿Cuántas veces estamos tumbados encima de ese clavo y nos pasamos el día quejándonos? Y, sin embargo, no somos capaces de tomar una decisión y levantarnos.

¿Tienes motivos para levantarte, para tomar una la decisión de realmente dar un gran cambio, o aún estás cómodo en la incomodidad?

Donde tus sueños te lleven, Javier Iriondo